Muchas personas entienden que definir la cartera es ir comprando acciones de empresa conforme van ahorrando dinero.
Para mi la definición de la cartera es como la construcción de una casa, primero haces los planos (defines la cartera), después revisas el material que tienes y que vas a ir consiguiendo (el dinero) y finalmente te pones a poner ladrillos poco a poco, junto con el resto de los materiales. El que coge todos sus ahorros y se pone a poner ladrillos sin pensar, por lo general termina teniendo una chapuza de casa, o peor, tira paredes enteras que estaban mal construidas.
A continuación describo como defino una cartera modelo, y después en el paso 3 «ejecuta» pues vamos convirtiendo esa planificación en realidad, siguiendo en la medida de lo posible el plan inicial.
Es un proceso iterativo, que se va afinando conforme se repasan los detalles.
Paso 1.- Definimos objetivo
Asumo que se tiene definido un objetivo claro de lo que se quiere conseguir, es decir, una fecha objetivo (por ejemplo «31/12/2050») y la cantidad redonda que creas que vas a conseguir ahorrar/invertir en ese tiempo (por ejemplo «50.000€»).
Yo siempre aconsejo que sea una fecha especial para la persona que lo va a hacer, una fecha que tenga significado especial.
Paso 2.- Definimos las empresas que queremos en nuestra cartera
Analiza y define que sectores de empresas quieres tener y qué empresas en concreto quieres añadir. Un ejemplo de como elegir acciones lo tienes aquí, está enfocado en empresas que se llaman reyes del dividendo (dividend kings).
Después yo las clasifico conforme al macro sector que define Morningstar y también la industria a la que pertenece esta empresa. Esto me permitirá definir las bases de diversificación.
A esa lista inicial le voy añadiendo un porcentaje de asignación de la cartera.
Dependiendo de la cantidad de dinero que se vaya a invertir, el número de empresas puede ser mayor o menor.
Hay mucha literatura y recomendaciones acerca de esto y dependiendo del estilo de inversión, podemos encontrar recomendaciones de carteras muy concentradas (solo 5 – 7 empresas) hasta carteras muy diversificadas (de 60 empresas).
Lo que yo entiendo como líneas básicas del número de carteras es:
- Define el número en función de tu perfil de riesgo y la función de mitigador de riesgo que quieres que la diversificación haga por ti.
- De manera general:
- Cartera objetivo de 20.000€ puedes tener entre 8 – 20 empresas.
- Cartera objetivo de 30.000€ puedes tener entre 15 – 25 empresas.
- Cartera objetivo de 50.000€ puedes tener entre 20 – 30 empresas.
¿Supone una mayor diversificación un mayor trabajo?
No necesariamente, tener 15 ó 30 empresas no tiene por que ser mayor o menor trabajo. Alguien te podría decir, que si tienes menos empresas tienes que estudiar más a fondo esa cartera porque cada error te va a costar más dinero. Otras personas te diran que ellos eligen muchas empresas porque siguen el principio de la cartera convexa, el cual dice que uno debe adquirir empresas asumiendo que, aun cuando se estudien a fondo, no se tiene certeza de cual va a ir bien o mal, de manera que la diversificación minimiza el porcentaje de la cartera que queda afectado por una empresa que al final va mal.
¿Tener en cuenta los costes de adquisición?
Si, esto es fundamental a la hora de definir la cartera y el número de compras que uno puede llegar a realizar. Yo por ejemplo me gusta construir la posición poco a poco, en al menos 2 compras por empresa. ¿razones? el dinero que ahorro mensualmente no da para mucho, y además así busco un promedio de precio de compra mejor. Todo esto lo puedo hacer porque la comisión de compra-venta es muy baja.
Paso 3.- Asignamos porcentajes de asignación a la lista de empresas que queremos en nuestra cartera
Este ejercicio es muy interesante y está muy ligado al riesgo que uno quiere correr en función de la diversificación que quiere y cuanto le va a costar pagar esa diversificación (tiempo de seguimiento que uno se compromete a aplicar + el coste unitario de todas las compras que plantea hacer).
Este paso puede hacerte revisar a la baja o a la alta el número de empresas que uno tiene en cartera.
Durante este ejercicio una cosa interesante es ver el porcentaje y el valor en euros que supone esa asignación. Con eso en pantalla lo suyo es hacerse preguntas del tipo: si esta empresa cae un 50% en precio, ¿estoy dispuesto a aguantarla en cartera?.
Recuerda, cuando el precio va hacia arriba, todo es muy sencillo, cuando va para abajo, la cosa cambia.
Yo suelo asignar:
- 1% quiero esa empresa, pero le veo ciertos aspectos que me hacen ser muy conservador, o ya tengo otra empresa parecida.
- 2% quiero esa empresa, y para mi asignarle un 2% es lo estándar. Después a lo largo de los años, lo mismo subo al 3% o al 4%.
- 3% – 4% es una empresa que me da confianza, o que ella misma está creciendo y cada vez ocupa por méritos propios más porcentaje.
- 5% o más: esta empresa es un cohete y lleva años conmigo y crece y crece, y tengo tentaciones de venderla pero no lo hago.
Paso 4.- congelar esta versión de la cartera y comprometerse a construir esa misma
Suena de perogrullo, pero no lo es. Coge la versión que has definido y como si se tratase de los planos de la casa de tus sueños, comprométete personalmente a poner ladrillos hasta construir pared por pared esa casa que te has dispuesto a hacer.
Paso 5.- Construye tu casa
Pues eso, ve comprando las empresas que tienes planificado comprar en función de como evolucionan, priorizando según tus objetivos y según los precios de compra.
En la hoja puedes ir coloreando las empresas que vas completando posición, las que ya has comenzado y las que aun no has empezado. Del árido rojo en unos años deberías pasar a un cesped verde.
También en la hoja que adjunto abajo puedes ir completando numericamente la evolución (hay un ejemplo en la plantilla que adjunto abajo).
Paso 6.- Actualizar los planos de la casa
Las empresas que tienes en tu cartera objetivo puede ser que hayan tenido un problema grave y que de repente no cumplen con los criterios de compra que te has definido para ti mismo. En tal caso, lo que hago inicialmente es asignarle un 0% de posición, y al final de año, lo que suelo hacer es revisar la cartera completamente, haciendo ajustes si es necesario.
Yo al menos siempre he tenido más tiempo que dinero, con lo que cuando llego a final de año, quitar una empresa y poner otra me resulta sencillo porque voy viendo con tiempo que cosas no me convencen de esa empresa.
Piénsalo bien, creas un plan de 20 años de inversión y tienes mucho tiempo para estudiar las empresas que has elegido, y eso, cuando a lo mejor en el año 3 del plan compras esa empresa, ya la conoces mucho mejor que si vas identificando empresas y comprando por inercia o porque otro la tiene en su cartera.
Bueno, todo esto tiene mucho más detalles, pero por ahora lo dejo aquí. Si tienes alguna pregunta, dímelo.
Ah, adjunto una hoja de ejemplo para una cartera con objetivo de 20.000€ y otra de 50.000€. Es muy sencilla.
En la hoja de ejemplo se calculan los porcentajes de macro-sectores de Morningstar y de las industrias, pero tambíen podrías añadir la diversificación por paises, por monedas… al gusto del consumidor.
Críticas a esta mecánica de planificación
Cuando he explicado esta mecánica a alguien, no ha quedado exenta de críticas o partes donde no ven viable el ponerla en marcha.
Lo que he explicado arriba lo he simplificado mucho para tratar de centrar el foco en la planificación. Después la realidad la puedes moldear como quieras.
Adjunto algunas críticas que recibí:
Crítica / opinión | Mis comentarios |
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«Es que hay veces que no hay empresas que comprar, están todas caras» | Pues si, eso pasa a veces, y para mi eso no es un problema, porque normalmente tengo más tiempo que dinero. |
«Es que esto es hace el proceso aburrido» | La inversión para mi en cierto sentido es un proceso aburrido, se trata de encontrar un camino para ganar dinero, no para divertirse. Si quieres diversión, ve a un casino. |
«Es que ahora no soy capaz de definir 20 empresas para una cartera» | Pues no lo hagas, ve definiendo la cartera conforme vayas analizando y clasificando empresas, nadie te impide ir poniendo algunos cimientos a la cartera e ir comprando empresas. Otra cosas que puedes hacer es dejar una línea para una próxima empresa defensiva, que no sabes cual es, pero que en el equilibrio de macro-sector, quieres poder tener. |
«Esto es muy rígido» | Pues flexibilizalo o no lo uses, hay otras maneras de montar una cartera, no hay que desesperar. |
Pensamientos finales
Lo más difícil cuando se hace este ejercicio al principio del todo es imaginarse como va a ser el camino, entender si va a funcionar o no.
Si estás en esa situación ahora mismo, olvídalo, céntrate en definir la casa de tus sueños, en saber si la quieres con piscina o no, ya te ocuparás del color de la valla de la piscina más tarde.
1 comentario en «Define tu cartera como si fuera la casa de tus sueños»